BMW ofrece una nueva interpretación del coche deportivo de altas prestaciones con sus modelos M3 y M4 Coupé. El BMW M3 Coupé de la cuarta generación, del que se fabricaron más de 40.000
ejemplares, cede el paso al nuevo modelo BMW M4 Coupé, que se encargará de continuar la exitosa historia de su antecesor y, a la vez, con su denominación de tipo M4 marca el inicio de la serie que se
basa en la anterior. Por primera vez se estrenan simultáneamente la versión coupé y la versión de cuatro puertas, que según la lógica de la denominación de tipos de modelos de la marca, es la berlina
BMW M3.
El motor es el corazón de cualquier modelo M de BMW y el nuevo motor turbo de seis cilindros en línea con tecnología M TwinPower Turbo y de altas revoluciones, completamente nuevo y desarrollado
especialmente para la nueva berlina BMW M3 y para el nuevo BMW M4 Coupé, tiene una potencia máxima de 431 CV. Su par motor máximo, disponible durante un amplio margen de revoluciones, es de 550 Nm,
lo que significa que supera el par máximo del modelo antecesor en aproximadamente un 40 por ciento. El consumo y las emisiones son inferiores en aproximadamente 25 por ciento. Tanto la berlina BMW M3
como el BMW M4 Coupé paran el crono en 4,1 segundos (con la caja opcional M de siete marchas y doble embrague) al acelerar de 0 a 100 km/h.
En comparación con el modelo anterior, fue posible reducir el peso en 80 kilogramos considerando el equipamiento correspondiente. Esta reducción beneficia el comportamiento dinámico y, además,
aumenta la eficiencia de ambos modelos. Concretamente, el BMW M4 Coupé pesa 1.497 kilogramos en orden de marcha según norma DIN. Este resultado se consiguió gracias a la aplicación
inteligente de numerosas medidas destinadas al uso de materiales ligeros.
Una de las metas prioritarias durante el trabajo de desarrollo de la berlina BMW M3 y del BMW M4 Coupé consistió en obtener dos modelos aptos para hacer buenos tiempos en circuitos de
carrera. Por lo tanto, ambos tienen un sistema de refrigeración configurado para el uso en circuitos, capaz de garantizar una temperatura óptima del motor, del turbo y de la caja de cambios.
Y para que el carácter de competición deportiva no solamente se manifieste en la tecnología, sino también en el reglaje fino de los dos coches, los ingenieros optaron por colaborar estrechamente con
pilotos profesionales de BMW Motorsport durante la fase de desarrollo, como Bruno Spengler y Timo Glock.